Las relaciones de amistad juegan un papel muy importante para cumplir El propósito de Dios.

 

Las relaciones de amistad juegan un papel muy importante para cumplir El propósito de Dios.

Alguna vez tú pusiste a pensar que la primera vez que Dios dijo que algo no era bueno fue antes de crear las relaciones para el hombre?

Nuestro Dios es un ser relacional y Él nos creó a su imagen. Nadie tiene la capacidad de cumplir con el propósito de Dios para sus vidas y llegar a su destino profético sin valerse de otros. Las relaciones de amistad juegan un papel muy importante para cumplir El propósito de Dios.

¿Pero, y como construimos una verdadera amistad?

Una amistad involucra una relación y como en toda relación se necesita invertir tiempo en ella. Nunca tendrás de forma automática buenas amistades, eso toma tiempo y compromiso. Tienes que darte a la tarea de invertir en tus relaciones de amistad para que estas funcionen.

Algo que Jesús hizo con sus discípulos, a los cuales les llamo “amigos” fue pasar tiempo con ellos e invertir tiempo en ellos. Los evangelios muestran a Jesús comiendo, viajando, o simplemente caminando con sus discípulos. El oraba por ellos y les enseñaba. El invertía tiempo de calidad en ellos, sus amigos le conocían y él les conocía a sus amigos de manera intima.

En Eclesiastés 4:9-10 nos dice la palabra que “Mejores son dos que uno porque si cayeren, el uno levantará a su compañero”

 “Caminar con Dios en un mundo manchado de pecado con nuestra carne pecaminosa cabalgada por un enemigo empeñado, es demasiado difícil como para hacerlo solos”

Hoy te quiero animar, así como hizo Jesús, a invertir en tus amigos, pasen tiempo juntos, creen recuerdos, escucharse mutuamente, oren los unos por los otros.

La vida se trata de relaciones. Dios es amor y quiere que aprendas a amarlo a Él por sobre todas las cosas, pero también a amar a los demás. Esos son los dos mandamientos más importantes que El no dejo.

¡En todo tiempo ama a tu amigo porque es como un hermano en tiempo de angustia!

 

Por Patricia Guerreros